En un principio, la presentación de Johnny Herrera y Rodrigo Echeverría, los dos primeros refuerzos de Everton, pretendía incorporar dos caras nuevas más para el plantel del 2020: Patricio Rubio y Fernando Saavedra.
El delantero -que fue solicitado expresamente por el técnico Javier Torrente, quien ya lo dirigió en su primer paso por la banca auriazul el 2018- tiene un acuerdo de palabra para firmar por los oro y cielo.
Sin embargo, según explican cercanos a las negociaciones, todavía falta afinar detalles con los montos que involucrará el contrato del ariete formado en Colo Colo y que quedó libre tras jugar todo este año en Universidad de Concepción, donde anotó cinco goles por el campeonato nacional y la misma cantidad por Copa Libertadores. Mientras tanto, y ante la no concreción de las tratativas, Rubio comienza a recibir nuevos ofrecimientos de otros clubes con miras a la próxima temporada.
Entusiasmado
Por su parte, Fernando Saavedra sigue negociando con Everton. El mediocampista se nota entusiasmado ante la posibilidad de volver luego del frustrado intento de principios de año, cuando se tuvo que resignar con partir a Deportes Temuco en la Primera B.
Campeón con Everton el 2008, es un jugador plenamente identificado con la camiseta oro y cielo, un referente que bien le vendría al club en un momento como este. Después de su último paso por Viña del Mar entre 2010 y 2016, el volante jugó en San Luis de Quillota, Unión La Calera y los temuquenses, una larga vuelta que podría tener un final feliz para el 2020: a sus 33 años, podría ser la oportunidad idónea para retirarse en su casa.
Fuentes cercanas a las negociaciones aseguran que van muy bien encaminadas, pero no quieren dar nada por sentado hasta la firma.
Tras la partida de Diego Orellana, quien ya dio por cerrada la puerta con Everton, al menos de su parte, la jugada por Saavedra podría significar una manera de compensar, sobre todo luego de las duras críticas recibidas por parte de la hinchada viñamarina.
Pero ayer por la tarde, uno que se convirtió en la tercera incorporación oro y cielo para la temporada 2020 fue el delantero Marco Sebastián Pol. El atacante argentino, que el primer semestre del 2019 jugó en Deportes Valdivia y el segundo en O'Higgins, anotando cinco goles en 10 partidos con los celestes, firmó un contrato por un año.