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Dixie, swing y blues marcan el Festival de Jazz que se realizará esta semana en Quilpué

MÚSICA. Bandas de trayectoria y nuevas agrupaciones darán vida al encuentro.
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Diversos estilos se darán cita en el VIII Festival de Jazz Eugenio Rengifo de Quilpué, que comienza este viernes 28 de febrero, a las 19.30 horas, en la plaza de la ciudad, con entrada liberada. En la jornada inaugural se presentarán las agrupaciones Valparaíso Dixieland Jazz Band, Natalia Ramírez y los Swing Song Bossa, junto a Little Matt Blues Band.

La jornada comenzará con Valparaíso Dixieland Jazz Band, agrupación formada en 1988 por el odontólogo y trombonista Carlos Briede, que en sus filas tuvo a verdaderas leyendas del jazz nacional como el propio Eugenio Rengifo en trompeta, el saxofonista Alfredo Espinoza y el contrabajista Luis Basaure.

La agrupación llegará hasta la ciudad del sol con todo su repertorio de dixieland clásico que tantos seguidores le ha reportado durante sus años de trayectoria.

Una de las figuras de la primera jornada es la cantante Natalia Ramírez, quien se dio a conocer como la solista de la orquesta de ska y jazz Santiago Downbeat. Es considerada como una especialista de repertorios de la nostalgia y de los primeros standards del swing, junto a otras formas de canciones melódicas, cultivando una estética que ha llevado a su puesta en escena, con vestuario y peinados, que la han distinguido.

Sobre su participación en el VIII Festival de Jazz de Quilpué, la cantante señaló que "es un honor haber sido invitada, es la primera vez que me presento en Quilpué y por lo mismo espero poder encontrar una conexión con su gente y disfrutar juntos el show que hemos estado preparando con mucho cariño".

En cuanto a su repertorio para este viernes, Natalia aseguró que "el público se encontrará con un show dinámico que mezcla y fusiona las sonoridades características del swing con el jazz manouche, bolero y el bossa nova".

Jurado encuentra culpable a Harvey Weinstein de los delitos de violación y acto criminal

CONDENA. El otrora poderoso productor de Hollywood podría enfrentar hasta 29 años en la cárcel, aunque restan etapas de apelación. Su caso fue el impulso para el movimiento "Me Too".
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El productor de cine Harvey Weinstein enfrenta un máximo de 29 años de cárcel luego que un jurado lo hallara culpable de los delitos de acto sexual criminal y violación en tercer grado, y lo absolviera de otros dos más graves, de agresión sexual "depredadora", y violación en primer grado, en un juicio simbólico para el movimiento #MeToo.

A falta de que el juez James Burke dicte la condena el próximo 11 de marzo, Weinstein, que salió de la sala custodiado por los alguaciles en dirección a la cárcel, pero no esposado, se enfrenta así un mínimo de 5 años y un máximo de 25 por un acto sexual criminal, por practicar sexo oral a la fuerza a la asistente de producción Mimi Haley en un hotel de Nueva York en 2006.

El segundo cargo del que ha sido declarado culpable es una violación en tercer grado a la aspirante a actriz Jessica Mann ocurrida en 2013, un delito que acarrea un máximo de 4 años y es menos grave que el de violación en primer grado ya que si bien implica que no hubo consentimiento, también implica que no hubo un componente de fuerza.

Absuelto

El jurado ha decidido absolver a Weinstein de los dos cargos más graves de los cinco que se le imputaban, los de agresión sexual "depredadora", que establecían un patrón de comportamiento con el agravante de la supuesta violación contra la actriz Annabella Sciorra hace casi 30 años, y también lo ha absuelto de la violación en primer grado de Mann.

Tras conocerse el veredicto, la Fiscalía pidió que el juez considere las penas máximas de los dos delitos para la sentencia de Weinstein, mientras que su defensa argumentó en contra de su ingreso inmediato en prisión remitiéndose a sus problemas médicos y a su buen comportamiento durante el proceso, que comenzó el pasado 6 de enero con la selección del jurado.

La líder del movimiento "Me Too", Tarana Burke, expresó su satisfacción por la sentencia contra el productor Weinstein y afirmó que esto no habría sido posible "sin las sobrevivientes" que "rompieron el silencio".

"Hoy, un jurado confirmó lo que todos sabemos: Weinstein cometió agresión sexual. Esto no hubiera sido posible sin las voces de las que rompen el silencio dentro y fuera de la sala del tribunal, las sobrevivientes que testificaron valientemente y los miembros del jurado que, a pesar de una estrategia de la defensa implacable y poco ética, votaron para encontrar culpable a Weinstein", dijo.

Destacado productor

Weinstein es una de las figuras más poderosas de Hollywood de las últimas décadas. Nacido en 1952 en un modesto barrio de Queens, Nueva York, Weinstein creció en un complejo de viviendas de clase media, junto con sus padres de origen judío y su hermano menor Bob.

Tras estudiar en la Universidad Estatal de Nueva York, formó a principios de los 70 una compañía de promoción de conciertos con un compañero de estudios, "Harvey and Corky Presents", que llevó importantes músicos a la localidad neoyorquina de Buffalo, como Frank Sinatra y los Rolling Stones. A finales de los 70, Weinstein se alió con su hermano Bob para formar una compañía entorno a una de las pasiones que ambos compartían: el cine.

Con los fondos adquiridos de su promotora musical, crearon la que entonces era una pequeña productora independiente que no tardaría en convertirse en una de las más prominentes del séptimo arte y que bautizaron Miramax.

Después de diez años de trabajo, la empresa se posicionó a finales de los 80 entre las productoras de mayor prestigio con tres éxitos: "Sex, Lies and Videotapes", de Steven Soderbergh; "My Left Foot", de Jim Sheridan y que le valió el Óscar a mejor actor a Daniel Day-Lewis, y "Cinema Paradiso", de Giuseppe Tornatore.

Años de premios

En 1993, Disney compró Miramax por entre 60 y 80 millones de dólares, un importante espaldarazo para el proyecto familiar de los hermanos Weinstein, que al año siguiente fueron responsables del largometraje de culto "Pulp Fiction", una producción de 8,5 millones de dólares que recaudó más de 200 millones en taquilla. Desde 1992 a 2003, Miramax contó con al menos una nominación a los Óscar cada año, de las que varias se llevaron el galardón a mejor película, como "The English Patient", en 1997; "Shakespeare in Love", en 1999, y "Chicago",} en 2003.

"Esto no hubiera sido posible sin las voces de las que rompen el silencio dentro y fuera de la sala del tribunal, las sobrevivientes que testificaron valientemente y los miembros del jurado".

Tarana Burke, Líder del movimiento "Me Too"