Comisión aprueba segundo retiro del 10% y Gobierno pide que no sea universal
PENSIONES. Diputados respaldaron el proyecto y hoy continuaría la discusión de indicaciones.
La Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados aprobó, con siete votos a favor y seis en contra, el proyecto de reforma constitucional que permite el retiro extraordinario de un segundo 10% desde las cuentas individuales de los fondos de pensiones de las AFP.
La propuesta, presentada por diputados de oposición como Pamela Jiles (Partido Humanista), indica que a los afiliados del sistema privado de pensiones, en forma voluntaria y excepcional, se les permitirá hacer un segundo retiro, de hasta el 10% de los fondos, con un monto máximo de retiro equivalente a 150 UF y un mínimo de 35 UF.
En caso de que el 10% de los fondos acumulados sea inferior a 35 UF, el afiliado podrá retirar hasta dicho monto. En el caso de que los fondos acumulados en su cuenta de capitalización individual sean inferiores a 35 UF, el afiliado podrá retirar la totalidad de lo acumulado en dicha cuenta. Este retiro, a diferencia del primero, se haría de una vez por cada afiliado. El Gobierno confirmó la reserva de constitucionalidad si la iniciativa prospera.
Quedó pendiente votar las indicaciones presentadas al proyecto, lo cual podría retomarse hoy, según explicaron Jiles y Matías Walker (DC), presidente de la comisión.
Varias de esas indicaciones fueron presentadas por el oficialismo e incluyen que solo se permita retirar a quienes han tenido una merma del 30% en sus ingresos en la crisis, se prohíba el uso de los recursos en inversiones y se establezca que quienes perciben altos ingresos paguen impuestos.
Hacienda
Al respecto, el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, dijo esperar que, de avanzar el retiro, no sea universal; en esta línea, consideró que "las indicaciones de Chile Vamos van en la dirección correcta, al menos limitarlo a las personas que han tenido caídas en sus ingresos. Los números muestran que, en el primer retiro, dos de cada tres pesos que se retiraron correspondieron a personas que mantenían su 'pega' y más de la mitad, a personas que no vieron caída en sus ingresos. Entonces, ¿por qué hacerlo universal, por qué hacerlo para todos? ¿No será más razonable -como ha planteado Chile Vamos- limitarlo a aquellos que han tenido una caída importante en sus ingresos?".
Briones también desechó la idea de extender el IFE, como han pedido algunos legisladores como alternativa a este segundo retiro del 10%. "En el acuerdo con la oposición (de junio), está escrito que el IFE es un vehículo de emergencia para que, en el peor momento de la pandemia, las familias se quedaran en casa cuidándose, y no tener que hacer esfuerzos para tener ingresos laborales que los exponían al contagio. Es decir, era un instrumento estrictamente ligado a las medidas de emergencia, a la cuarentena. Hoy, a nivel país, esas cuarentenas han cedido mayoritariamente: tenemos a menos de un 10% de la población con restricciones severas de movilidad, estamos en un escenario distinto", argumentó.
El rechazo a extender el IFE provocó que la bancada PPD se alineara con el avance del proyecto.
Enfermos terminales
En la misma sesión, y por amplia mayoría, la Comisión de Constitución aprobó y despachó a Sala el proyecto que posibilita el retiro de fondos previsionales, sin limitación en el monto, a personas afectadas por una enfermedad terminal, presentado por el diputado socialista Marcos Ilabaca.
La propuesta entiende por terminal la "enfermedad o condición patológica grave, progresiva e irreversible, que no tiene tratamiento eficaz de acuerdo a los conocimientos médicos y con pronóstico fatal en un plazo inminente, certificado por un profesional habilitado". El carácter de terminal debe ser diagnosticado por un médico cirujano y a la Superintendencia de Pensiones le correspondería regular los requisitos que deberá reunir dicho informe, pero en caso alguno podrá cuestionar la calificación de enfermedad terminal.
Según el proyecto, cada AFP tendrá cinco días para responder a la solicitud del afiliado.