Oportunidades para la minería
El cierre de la Fundición Ventanas y elroyaltya la minería abren un camino para la revalorización ciudadana de esta industria.
Esta semana se cumplieron dos hitos en el ámbito de la minería que tienen un impacto real, concreto y definitivo en la Región de Valparaíso. Pese a que se ubica entre las cinco o seis industrias que hacen mayor aporte al PIB regional -miles de millones de pesos anuales-, con dos faenas extractivas de gran envergadura (El Soldado, de Anglo American, y Andina, de Codelco), varios piques de mediano calibre y una multitud de obras pirquineras que constituyen una poderosa fuerza laboral, la actividad minera se conoce poco y mal en la zona. Su mayor visibilidad suele estar asociada a las controversias que provocan sus proyectos y las consecuencias medioambientales de sus faenas.
La implementación del royalty recién aprobado por el Congreso, que contempla una inédita redistribución del impuesto, con la entrega de unos $ 35 mil millones en la Región de Valparaíso, podría ayudar a cambiar esta resistencia a la actividad. En la práctica, este aporte anual incrementará los presupuestos del Gobierno Regional y 34 de las comunas con menores recursos. Visto así, se trata de un inédito impulso descentralizador y, al mismo tiempo, de un desafío mayor para las autoridades locales, que deberán establecer mecanismos de control de gestión y transparencia sobre el uso de estos fondos. El gobernador Rodrigo Mundaca y los cores, en este sentido, deberán construir una cartera de proyectos con orientación común o, también, apostar por una gran idea de largo plazo, para evitar que el pirquineo de votos entre los consejeros termine desmenuzando el aporte minero en iniciativas de bajo impacto.
El segundo hito es la aprobación de Sernageomin al cierre de la fundición de cobre que tiene Codelco en la localidad de Ventanas. El apagado de los hornos tras 58 años de trabajo continuo reducirá significativamente las emisiones de arsénico, anhídrido sulfuroso y material particulado, liberando significativamente a la llamada zona de sacrificio en Puchuncaví de su carga medioambiental.
Que dos hechos vinculados a una sola actividad económica se produzcan en tan corto tiempo no es común y abren una oportunidad para la revalorización de la actividad minera en una región que suele verla con desconfianza y temor.