Hace un par de años, un grupo de hinchas de Everton, reunidos bajo una misma pasión, colores y convicciones, conformó la Agrupación de Acción Evertoniana (A.D.A.E.). Y lo que comenzó como un grupo de estudio sobre el acontecer del club desde la irrupción de la sociedad anónima en 2006, pronto alcanzó nuevos ribetes y horizontes.

Hoy la organización cree firmemente que la Corporación Deportiva Everton de Viña del Mar es el medio para pelearle espacios a los actuales controladores; es desde allí donde se quieren posicionar sus líderes para que los hinchas oro y cielo recuperen su derecho a voz y voto en las decisiones que se toman al interior del club, considerando el avance que ha tenido en el Congreso el proyecto que modifica la ley que regula las sociedades anónimas deportivas profesionales, y que pretende fomentar una activa participación de las bases sociales.

Por lo mismo, y más allá de las dudas que tienen respecto a cómo se orquestó la operación para abrirle espacio al grupo económico que dirige a Everton actualmente, en A.D.A.E. apuntan ahora a ingresar a la Corporación presidida por Carlos Salazar. Una organización que opera sigilosamente, y en la que un grupo cerrado y pequeño de no más de 10 personas toma las decisiones centrándose únicamente en el ámbito deportivo no profesional.

Hoy la Corporación sólo trabaja en la ramas de fútbol amateur, fútbol sala y básquetbol. Atrás quedaron los años en que englobaba a diversas disciplinas deportivas como el ajedrez, el vóleibol e incluso el automovilismo.

A fin de cuentas, la organización posee muy poco peso en lo práctico y en lo político, aunque tiene un terreno en comodato en Achupallas, donde se pretende construir un gimnasio. "Tomaron la decisión de no pelearle nada a la sociedad anónima, como desligándose y caminar por líneas paralelas, con lo cual le hace un favor a la sociedad anónima", esgrime Ignacio Flores, presidente de A.D.A.E.

Hace unos meses, en un programa radial, Salazar afirmó que la Corporación no estaba cerrada a la gente, pese a que varios hinchas han venido solicitando desde hace tiempo espacios para participar. Sin embargo, ingresar a esta orgánica no es sencillo.

Desde A.D.A.E. sostienen que tiempo atrás, cuando la actual directiva le cambió el nombre a la organización, que pasó a ser Corporación Deportiva, Social y Cultural Everton de Viña del Mar, se aprovechó de modificar los estatutos, con lo cual cualquier persona que quisiese ser socio debía ser intivado por un socio actual (y que sea parte del directorio) y luego ser aprobado por una Comisión Revisadora.

"Nosotros queremos que la gente vibre con Everton. Cada día que pasa hay un evertoniano menos. La Corporación, ya que la S.A. se alejó de la gente, es la que tiene que acercar la gente al club; el rol social no se está cumpliendo. Hay que ir a Forestal, Achupallas, a todos los cerros de Viña y mover todo en función de los colores de Everton. Hay mucha gente capaz y que quiere ayudar, pero con estas personas que ponen trabas tenemos las puertas cerradas", se lamenta Miguel Arellano, vicepresidente de A.D.A.E., añadiendo que "nos encantaría poder recuperar esto para que la gente se sienta partícipe".

En la Agrupación de Acción Evertoniana aseguran que tienen como objetivo llevar un candidato a las elecciones que la Corporación debe realizar el 2020.

Los lineamientos y la visión es clara en el grupo. "Nosotros necesitamos generar identificación, y esa identificación hace 20 o 15 años existía. Hoy cada vez existe menos. No solamente en lo que tiene que ver con la pasión o ir al estadio", explica Flores, agregando que "la mercantilización del fútbol no puede ser tal que se pierdan las tradiciones, el arraigo, la identidad, el compromiso. No puede pasar eso porque Everton y el fútbol en las provincias viene a llenar un vacío orgánico que dejó la dictadura".

A.D.A.E. apuntan a recuperar ese rol social activo en Everton.

Con mucha ilusión desde la A.D.A.E. se sumaron a Los del Cerro para liderar "Recuperemos Everton", movimiento que tenía como bandera de lucha una serie de reivindicaciones, logrando como punto destacado una marcha por Viña del Mar. Sin embargo, ese impulso inicial decayó. "A la semana nadie estaba ni ahí, porque para qué era la marcha: algunos decían que era para bajar el precio de las entradas, o para que nos tomaran en cuenta, pero todo, absolutamente todo se centró en lo momentáneo y fugaz. No hay un proyecto a largo plazo. Nos quedamos en peleas chicas", asume Flores.

La dura lucha por recuperar la alicaída Corporación Everton

"La mercantilización del fútbol no puede ser tal que se pierdan tradiciones, arraigo e identidad"

Ignacio Flores, Presidente de A.D.A.E."

años de funcionamiento lleva la Agrupación de Acción Evertoniana (A.D.A.E.), que sesiona cada dos semanas. 2

hinchas de Everton participan activamente en las reuniones que periódicamente organiza la organización. 15

el año en que la S.A.D.P. Everton de Viña del Mar tomo el control, y con el tiempo redujo a cero la participación de la Corporación. 2006